"No necesito que nadie me dañe, yo solo puedo: el arte de la estupidez." 1. El Cruce de Caminos: Cuando la Realidad Rompe el Espejo Hay un momento en la vida en el que el teatro de la autojustificación se derrumba. Es el punto de quiebre donde el alma, exhausta de mentirse a sí misma, mira atrás y susurra la frase más honesta y desgarradora: "Si yo lo hubiera sabido... o peor aún, si yo hubiera querido saberlo." No hay dolor más agudo que el que infligimos a nosotros mismos por la ceguera voluntaria . Nos paramos en las ruinas de nuestra propia caída, sintiéndonos como necios, insensatos, tontos... En el fondo, la vergüenza nos grita: "No necesitaste un enemigo, tú te bastaste y sobraste. El arte de la estupidez lo dominaste a la perfección." Si esta reflexión ha cautivado tu atención, es porque ya cruzaste ese umbral. El simple hecho de que reconozcas tu "arte de la estupidez" no es un signo de debilid...
Un rincón para reflexionar y tener un momento de claridad